top of page

FUNDACIÓN CAMBIEMOS DE VIDA, A.C.

Fábrica de Ideas

  • Foto del escritor: Brissa Mendez
    Brissa Mendez
  • 2 oct 2020
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 5 oct 2020

La vida nos arrastra hacia nuevos horizontes de negocios, hace más de dos décadas se nos fue avisando de esta transformación mercantil, donde debimos avanzar con las nuevas tecnologías, acoplándonos a las necesidades de la población y sobre todo concientizarnos de los cambios climáticos ocasionados por las grandes industrias


Lamentablemente un puñado de industrias comprendió que por obligación tenían que ir caminando a nuevos horizontes tecnológicos, reinventándose en la manera de llevar sus negocios, adecuándose al régimen digital y que actualmente son las que llevan la batuta o se mantienen vigentes en el mercado


Hay ejemplos claros donde grandes industrias de productos a gran escala, han ido cayendo en abismos, porque las necesidades de los seres humanos, han cambiado radicalmente, sobre todo cuando se tuvieron que resguardar por temas de salud, donde descubrieron que por lo menos un 50% de los productos que tenemos o adquirimos en el mercado son innecesarios

Esto es hecho inevitable, pero sobre todo un dato negativo para los empresarios que tienen grandes naves industriales, que ocupaban para almacenar obscenas cantidades de productos, o de materias primas para poner un ejemplo básico, grandes madererías han fracasado, ya que cada día los árboles son menos, o existen otras alternativas que la suplantan, como es el caso del triplay, macopan, etc. lo que ocasiona que los dueños se vean en la necesidad de cerrar sus negocios y dejar a la deriva sus grandes esqueletos industriales


Quizá en el menor de los casos algunas naves industriales trabajan a un 50% decapacidad o a un 20%, esto indica que el costo del mantenimiento tarde o temprano se sale de las manos, para inesperadamente dejarlas en el abandono, esto quiere decir que grandes extensiones de terreno no se están ocupando; resulta ser el colmo para una ciudad sobrepoblada como es la Ciudad de México, donde encontrar una habitación para pasar la noche resulta muy complicado


Por otro lado, tenemos que estos esqueletos industriales o naves industriales, son un patrimonio industrial joven, que forma parte de un entorno citadino o urbano y que sería una ofensa derribarlas en la actualidad por ser un derroche económico, y en vez de desecharlas, debemos estar atentos a transformar, reciclar o renovar productos, para evitar un negativo impacto ambiental


De tal forma que es importante abrir nuestra mente, nuestro panorama, utilizando la imaginación empresarial, para reconvertir el esqueleto arquitectónico industrial. Para crear nuevas formas de negocio, ajustados a esta mal llamada nueva normalidad, donde las prioridades de hace unos 8 meses fenecieron junto con las pérdidas humanas que hemos tenido la mayoría de la población.


Esto nos abre la puerta de par en par para dar entrada a crear nuevos espacios de oportunidad, donde aparece la economía colaborativa la cual tiene el potencial de generar numerosos beneficios para la región, reduciendo la huella ambiental, promoviendo el acceso a nuevos servicios y productos, que facilita la distribución más equitativa de la riqueza. Para fomentar valores sociales positivos de intercambio y colaboración. Propiamente conocidos como espacios coworking en arquitectura industrial, que se ajusta a un mismo ecosistema económico


Derivado de lo anteriormente expuesto, nos marca la pauta para activar estos espacios, siendo fieles a su infraestructura, donde simplemente ocupando elementos como la madera y el vidrio, pueda seguir luciendo tal cual es, y resulte atractivo a las personas o potenciales inversionistas


A ti ¿qué se te ocurre realizar dentro de una nave industrial?


Espero tus propuestas y comentarios

コメント


Formulario de suscripción

©2020 por FUNDACIÓN CAMBIEMOS DE VIDA, A.C.. Creada con Wix.com

bottom of page